Peinando canas

La Posada del peine de Madrid

La Posada del peine. Madrid, 2018 ©ReviveMadrid

posada del peine, el hotel más longevo de españa

Si hace cuatrocientos años, al llegar a Madrid después de un ajetreado viaje en coche de caballos, hubieras necesitado buscar alojamiento para hacer noche, habrías podido hacerlo, igual que hoy, en el hotel más antiguo de España: la Posada del Peine.

En 1610 Madrid vuelve a ser Corte tras su paso por Valladolid, doblando el número de habitantes. El ir y venir de viajeros y gente de paso hacía necesaria la creación de nuevos hospedajes. Juan Posada fundó entonces este alojamiento, adaptando una vivienda de la antigua calle Vicario Viejo, hoy Marqués Viudo de Pontejos.

El lugar elegido era estratégico, no sólo por su situación junto a la Plaza Mayor, la más importante de la Villa, sino porque también era vecina de la Casa de Postas, punto de recepción y envío del correo real y lugar de llegada de carruajes y diligencias llenas de viajeros.

Para darle al establecimiento un punto de distinción, se colocó un peine en cada habitación para uso de los clientes, atado con una cuerda al lavamanos para que nadie se lo pudiera llevar. Este lujo fue tan sonado que acabó por darle nombre a la posada.

El establecimiento llegó a contar con unas 150 habitaciones, algo excepcional para la época. Las más nobles daban a la calle, más grandes y mejor amuebladas, con luz y aire fresco. Las interiores en cambio eran prácticamente zulos, oscuras, pequeñas y sin comodidades. Además, se decía que desde el armario de la habitación 126 se accedía a una escalera que conducía a una habitación secreta, empleada para la celebración de reuniones clandestinas, ocultar fugitivos y favorecer encuentros amorosos anónimos.

En 1796, los dueños ampliaron la posada comprando la casa contigua, que daba a la calle San Cristóbal. De la supervisión de las obras se encargó Juan de Villanueva. En 1863 el edificio ganó una altura más, llegando esa estructura, si bien renovada, a nuestros días

¿Qué crees que pensarían sus primeros inquilinos si vieran que el peine de los baños se ha transformado hoy en duchas de hidromasaje y los caballos de la puerta en bicicletas eléctricas?

Placa conmemorativa de la Posada del Peine. Madrid

¡Esto parece la Posada del Peine!
— Dicho popular castizo


¿Cómo puedo llegar a la posada del peine en madrid?